Las Medulas antigua mina de oro romana, (desde el mirador de Orellan)
El sistema de explotación se basaba en el empleo de la fuerza hidráulica, según lo explicó ya el naturalista romano Plinio El Viejo en el libro 33 de su Historia Natural. En el caso de Las Médulas llegaron a transvasar agua desde la cuenca del Duero hasta la del Sil con canales que alcanzaron más de 100 km. Para trazar esta red hidráulica desde la Cabrera y la Valdueza, utilizaron sobre todo una especie de gran nivel de veinte pies de longitud (unos 6 m) que Vitrivio denominó “corobates”. Cuando se contaba con una pendiente considerable, el agua se arrojaba desde los
depósitos mediante canales para que fuese arrastrando el conglomerado aurífero, como si de una cárcava o zanja artificial se tratase. Al final de esas zanjas se situaría el canal de lavado, donde el oro quedaba depositado por su peso. Esto puede verse muy bien en las zanjas de El Couso y la Furnia, justo al este del mirador de Orellán.